Anoxia perinatal
El periodo perinatal comprende
desde el momento del nacimiento hasta dos semanas después del parto. En este
periodo, sobre todo durante el parto, puede producirse lo que se conoce como
asfixia perinatal, que consiste en una falta de oxígeno (hipoxia) o una falta
de perfusión o flujo sanguíneo cerebral adecuado (isquemia), produciendo una
agresión al feto o al recién nacido.
Las causas pueden producirse por
las características de la placenta durante el embarazo, embarazo de riesgo, malformaciones,
infecciones, por estrangulamiento del cordón u La anoxia del recién nacido
suele producirse por una dificultad en el feto debido a causas numerosas, en el
momento del parto la necesidad de oxígeno es mayor por el esfuerzo que
representa, lo que supone que si el feto tiene dificultades para respirar el
parto le va a resultar difícil y puede producirse una falta de oxígeno que
puede dañar sus constantes vitales o producir lesiones cerebrales graves e
incluso irreversibles umbilical o por causas desconocidas.
Factores De Riesgo
Existen numerosos factores que
conllevan riesgo de anoxia perinatal, estas situaciones se han relacionado con
patologías maternas, gestacionales o fetales propiamente dichas:
Maternas
Enfermedades generales maternas.
Factores en relación al embarazo y parto (eclampsia,
anomalías canal del parto, analgesia-anestesia, medicaciones)
Placentarias
Insuficiencia,
desprendimiento, hematomas.
Nudos, rotura, prolapso
Fetales
Malformaciones congénitas.
Anemia, Infecciones.
Neonatales
Prematuridad, alteraciones pulmonares, obstrucción vía
aérea.
Alteración SNC (medicaciones, malformaciones…)
Alteraciones músculo esqueléticas.
Cardiológicas.
Después del nacimiento, la anoxia puede ser el resultado de
hemorragias, exposición a tóxicos, insuficiencia respiratoria, cardiopatías,
trauma craneal, etc.
Consecuencias
Neurológicas
El síndrome neurológico
consecuencia de la asfixia perinatal se denomina encefalopatía
hipoxico-isquémica (EHI) y puede presentar diversos grados de severidad,
dependiendo del grado de hipoxia y de la duración de ésta. No hay datos sobre
cuál es el período mínimo de duración del periodo hipoxico para que produzca
EHI. Se caracteriza por el deterioro de la alerta, alteraciones del tono
muscular y respuestas motoras, alteraciones en los reflejos y la presencia de
convulsiones.
En cuadros leves no siempre
aparecen déficit neuropsicológicos importantes y la cognición resulta poco
alterada, aunque algunos niños pueden presentar problemas psicomotores, dificultades del aprendizaje o del lenguaje.
Pueden resultar afectados diversos procesos como la atención, memoria,
lenguaje, lectura o escritura y la manifestación no es siempre inmediata, sino
que los trastornos aparecen a lo largo del desarrollo.
Las causas obstétricas que más
frecuentemente se asocian son las
siguientes:
1) Interrupción
de la circulación umbilical como compresión o accidentes del cordón, prolapso
del cordón o circulares irreductibles
2) Alteraciones
del intercambio gaseoso a nivel placentario como un desprendimiento prematuro
de placenta, placenta previa sangrante, insuficiencia placentaria.
3) Alteraciones
del flujo placentario como en la hipertensión arterial, hipotensión materna y
alteraciones de la contractilidad uterina
4) Deterioro de
la oxigenación materna.
5) Incapacidad
del recién nacido para establecer una transición con éxito de la circulación
fetal a la cardiopulmonar neonatal.
La última causa puede ser
secundaria a una obstrucción de la vía aérea, excesivo líquido en el pulmón,
presencia de meconio o por un esfuerzo respiratorio débil. Alternativamente
esto puede ocurrir como resultado de la asfixia
Diagnóstico de asfixia
Se ha usado como criterio
diagnóstico para definir asfixia los gases en sangre y el puntaje Apgar pero
los estudios a través de los años muestran una pobre correlación de ambos
elementos, con el pronóstico neurológico. En general la principal dificultad
para determinar el impacto de la asfixia sobre el pronóstico es definir asfixia.
La asfixia en el feto o en el
recién nacido es progresiva y potencialmente reversible.
La profundidad y la extensión de
la progresión son extremadamente variables.
Un estado asfíctico agudo y
severo puede ser letal en menos de 10 minutos.
Una asfixia moderada puede
progresivamente empeorar sobre los 30 minutos o más. Repetidos episodios
moderados de asfixia, pueden revertir espontáneamente pero producir un efecto
acumulativo de asfixia progresiva. En etapa precoz, la asfixia usualmente se
revierte espontáneamente si la causa es removida.
Una vez que la asfixia es severa
la reversión espontánea es imposible por los daños circulatorios y neurológicos
que la acompañan.
La Academia Americana de Pediatría en 1996 se
refiere al diagnóstico de asfixia y dice que, para hablar de asfixia perinatal
deben concurrir las siguientes condiciones:
• Apgar bajo entre 0 a 3 por más
de 5 minutos.
• Acidemia mixta o acidemia
metabólica profunda con pH de arteria umbilical
Menor de 7,00.
• Manifestaciones neurológicas
como hipotonía, convulsiones o coma.
• Evidencias de disfunción
multiorgánica.